Hoy escribo un post muy personal, ya sabéis que el heredero fue producto de una fecundación invitro y que salió bien a la primera, aunque luego tuvo muchísimas complicaciones, pero salió adelante, así que nos lo habían pintado bastante fácil, cuando queráis descongeláis los embriones que tenéis congelados y listo, ayyy!!! ilusa de mi y yo preocupándome porque teníamos dos embriones congelados, si solo decidíamos tener dos hijos, ¿qué haríamos con el tercero?…
Os resumo mis últimos siete meses, normalmente cuando estoy metida en tratamientos no me gusta hablar mucho del tema ni en 2.0 ni en real y suelen saber lo que estamos pasando pocas personas, de esta última creo que prácticamente nadie, pero ayer cerramos un ciclo y creo que es el momento de contarlo.
En los últimos siete meses me he sometido a 3 transferencias embrionarias y un tratamiento de fecundación in vitro (FIV) la búsqueda del hermanito comenzó con la primera opción que teníamos, descongelar uno de los dos embriones, pero resulta que uno de los dos al descongelar degeneró, así que tuvieron que descongelar el segundo, nos quedábamos con balance de embriones = 0, me lo transfirieron y dos semanas después tuve mi primer negativo, que sensación más horrible y más cuando sabes que la siguiente opción es repetir el ciclo de FIV, tardaron 3 o 4 semanas en la clinica para darnos cita con la doctora y en esa consulta me sentí como cuando ponía la pantalla de las maquitas de los recreativos INSERT COIN, decidimos cambiar de clínica porque no nos estaba gustando nada como nos estaban tratando y lo saturada que estaba la clínica. Así que nos fuimos a otra, a la vez que pediamos cita en la Seguridad Social, porque oye para algo pagamos una buena pasta al mes, y ya os conté aquí lo que nos ocurrió. Así que via SS cerrada.

Lo dejamos todo listo, análisis, lista de medicación… y programamos las fechas para que no interfirieran en el trabajo y cuando llamamos para comenzar nos dijeron que solo pasaban consulta de 9 a 11 d ela mañana, lo que me suponía que durante unos 15 días, prácticamente día si, día no iba a llegar cerca de dos horas tarde a trabajar, les pedí que me pusieran con otro doctor por la tarde y me dijeron que todos pasaban consulta a la misma hora, pero que me daban justificantes médicos sin que pusiera nada de fertilidad, solo con el membrete del hospital, a lo que les contesté y que le cuento a mi jefe, que me estoy muriendo para tener que ir día sí, día no al hospital 😳😳😳😤
Así que sobre la marcha decidimos cambiar de clínica, encima que el tratamiento ya es estresante de por sí, no me voy a estresar más por los horarios ilógicos de una clínica (y pagarle una pasta)

La nueva clínica, nos la recomendaron por varias sitios, personas con conocimiento de la materia, así que confiamos en ella, me estimularon en noviembre, muy poquito, para evitar el riesgo de tener otra torsión ovárica como en el tratamiento anterior, así que solo salieron 3 ovocitos maduros, que evolucionaron bien, 2 de calidad buena que me pusieron en ese ciclo y otro un pobre D que lo congelaron.

De esta tuve mi segundo negativo, y dolorosisimo por las esperanzas que teníamos en él, ya solo quedaba una opción con una escasa probabilidad de éxito😓

Después de navidad pasamos otra vez por otra transferencia embrionaria, el embrión descongeló bien, y estaba evolucionando, me lo transfirieron, pero no implantó, cosa esperable, así que este no me dolió tanto, porque casi no tenia esperanzas en él, había que ser realista, un D tiene un porcentaje de éxito muy bajo.
Y ahora ya contado esto, os cuento como me he sentido yo y como me ha maltratado la medicación, los chutes hormonales son un autentico maltrato para mi cuerpo, esta segunda FIV, me han dolido mucho más los pinchazos que la primera, no se si porque era otra medicación o porque yo ya sabía lo que era, me he hinchado como de costumbre, como un globo de gas, es mas el pecho creo que giraba las esquinas un par de pasos antes de llegar mi cuerpo, y ¡odio, odio, odio la progesterona!!! al principio lo voy llevando bien, pero cuando llevas 10 días de Betaespera, más los días anteriores que también hay que ponerla, con la zona íntima (yo había puesto otra palabra y Mr.A me la ha hecho corregir 😂) pringada de proesterona, es lo peor de lo peor y por cierto a los laboratorios que la fabrican, ya se les podía ocurrir hacer unos aplicadores para ponerla, porque termino hasta las narices de metérmela hasta el infinito y más allá con el dedo, y teniendo en cuenta de que hay que ponerla 3 veces al día, siempre pilla por lo menos una vez fuera de casa, así que lávate las manos en un baño público, entra al baño y cierra la puerta sin tocar nada con la mano que vas a coger la pastillita de marras, coge el blister, saca la pastilla, y mierda! se ha apagado la luz, en un acto reflejo le das al interruptor y …. ya sabéis con qué mano, alá ya la he liado, ahora salgo a lavarme otra vez las manos con el pantalón por las rodillas, o me recompongo y comienzo otra vez de cero, y que esta vez no se me ocurra tocar nada, porque a este paso me llevo una infección de «bola extra».
Ayer tuvimos la consulta con el médico, esa consulta de después de un negativo, la primera vez que la tuvimos, Mr.A me preguntó, ¿y ahora para qué vamos? a mi lo primero que se me ocurrió contestarle fue, «para que nos den el pésame???» porque claro en esa consulta poco más van a decirte, básicamente es eso, y ver si quieres seguir con otro tratamiento, entiendo que en los casos que no tengan muy claro si puede haber algún factor que no hayan estudiado y que pueda estar fomentando los negativos, propondrán más pruebas o cambio de método, pero lo nuestro es bastante claro, yo (de momento) no tengo problemas en óvulos, aunque si es cierto que de entrada mis ovocitos no son los «más bonitos» pero evolucionan bien y Mr.A tiene los espermatozoides que tiene (algo así como la mitad que lo normal) y son espermatozoides de sofá, nos han salido un poco perezosos, pero puestos a fecundar, fecundan sin problema, y los embriones que tenemos, suele haber de todo, mejores y peores, y ya somos padres, y nos hicieron todas las pruebas para el primer tratamiento, así que hay poco donde rascar.
De momento estoy concienciandome de que el heredero puede quedarse cómo hijo único, yo lo soy, y no es lo que quería para mi hijo, pero bueno, si yo lo he superado él también puede, como todo tiene su parte buena y su parte mala, así que estoy intentando enfocarlo por la buena e ir difuminando aquella imagen de familia numerosa que siempre tuve en mi cabeza. Por la parte física, ahora me toca cuidarme, perder peso, comenzar a hacer algo de deporte y volver a ser yo, recuperar un poco esa faceta de mi persona que ha quedado bastante reducida por la de mama.

Pues hasta aquí mis siete meses de lucha por volver a ser mama, resumidos en 5 embriones, 1 FIV, 3 beta, muchas hormonas, visitas al médico y sueños rotos (ahhh!!! y muchos euros)
Si tenéis cualquier duda o queréis saber algo de los tratamientos preguntadme que os cuento sin problema.